LETRAS DE COPLAS (S)

EN CONSTRUCCIÓN

SACRAMENTO
Pasodoble (1941)
Letra: José Antonio Ochaita y Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Estrellita Castro
I
Se casaron una noche
de Santiago, en Graná,
y fue la boda un derroche
de coplas y limoná.
Y junto a la fragua,
para Sacramento, empezó una vía
que fue lo mismito que gotas de agua,
iguá tóos los días.
Y aquella pobresa
no pudo aguantá
y se fue una tarde, soñando riquesas,
sin volver siquiera la vista p’atrá.
Estribillo:
Sacramento, Sacramento,
orgullo de mi queré,
tormento de mis tormentos
y arroyito de mi sé.
Tú m’has hecho desgrasiao,
pero yo no te mardigo;
las cuentas de tus pecaos
Dios las ajustará contigo.
Sacramento, Sacramento,
orgullo de mi queré.
II
Tuvo en joyas un tesoro
Y, en perlas, un Potosí,
pero no encontró con oro
quien la hisiera felí.
Y junto al herrero, mendigando amores,
allí volvió un día
y al fuego la fragua
tiró su dinero y su pedrería.
Anillo y pulsera
que yo me prendí,
¿quién, como vosotros, de algún metal fuera
Para, en esa llamas, poderme fundí?
Estribillo:
Sacramento, Sacramento,
orgullo de mi queré,
tormento de mis tormentos
y arroyito de mi sé.
Tú m’has hecho desgrasiao,
pero yo no te mardigo;
las cuentas de tus pecaos
Dios las ajustará contigo.
Sacramento, Sacramento,
orgullo de mi queré.

SALERO DE ESPAÑA
Farruca (1950)
Letra: Antonio Quintero y Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Conchita Piquer
I
Yo no quiero pa vivir una montaña
de oro fino y pedrería,
ni un palacio con tapices y una araña
con las luces encendías.
Pero en cambio si un mocito pinturero
me viniera a mí a ofrecer
la graciosa menudencia de un salero,
yo dejaba el mundo entero
pa ofrecerle mi querer.
Estribillo:
Salero de España, salero,
derraman los toreros
cuando juegan a morir.
Salero lo tiene la vieja,
con la cara de una almeja
y en el moño un alhelí.
Tiene un salero que es de oro y plata
la bulería de los calés,
y ese soldao que se retrata
fumando un puro más grande que él.
Salero de España, salero,
salero, por gracia de Dios,
Ay, España, que te quiero,
ay, España, que te quiero,
salerito de mi amor.
II
Por hermosa y elegante que te veas
y adorná de ricas pieles,
yo prefiero componerme en mi azotea
con jazmines y claveles.
Que te colmen de faisanes los ricachos
a la hora de almorzar,
que pa mí con un salero y un gazpacho,
son las bodas de Camacho
y el festín de Baltasar.
Estribillo:
Salero de España, salero,
derraman los toreros
cuando juegan a morir.
Salero lo tiene la vieja
con la cara de una almeja
y en el moño un alhelí.
Tiene un salero que es de oro y plata
la bulería de los calés,
y ese soldao que se retrata
fumando un puro más grande que él.
Salero de España, salero,
salero, por gracia de Dios,
Ay, España, que te quiero,
ay, España, que te quiero,
salerito de mi amor.
Final:
Tiene un salero que es de oro y plata
la bulería de los calés
y ese soldao que se retrata
fumando un puro más grande que él.
Salero de España, salero,
salero, por gracia de Dios,
Ay, España, que te quiero,
ay, España, que te quiero,
salerito de mi amor.

Versión grabada por:
Imperio de Triana
I
La mujer de España es tan garbosa ,
tan igual a un junco por su talle,
que al andar despierta salerosa
un mar de piropos en la calle.
¡Vaya una mujer!
¡Es el no va más!
¡Ole por la senda
con salero y paladar!
Estribillo:
Salero de España, salero,
derraman los toreros
cuando juegan a morir.
Salero lo tiene la vieja,
con la cara de una almeja
y en el moño un alhelí.
Tiene un salero que es de oro y plata
la bulería de los calés,
y ese soldao que se retrata
fumando un puro más grande que él.
Salero de España, salero,
salero, por gracia de Dios,
Ay, España, que te quiero,
ay, España, que te quiero,
salerito de mi amor.
II
La mujer de España es una rosa
y una flor no puede andar a tiros
porque tiene un alma milagrosa
que lo arregla todo con suspiros.
Vino de Jerez,
rojo de Alcalá
venga el estribillo
y pelillos a la mar.
Estribillo:
Salero de España, salero,
derraman los toreros
cuando juegan a morir.
Salero lo tiene la vieja,
con la cara de una almeja
y en el moño un alhelí.
Tiene un salero que es de oro y plata
la bulería de los calés,
y ese soldao que se retrata
fumando un puro más grande que él.
Salero de España, salero,
salero, por gracia de Dios,
Ay, España, que te quiero,
ay, España, que te quiero,
salerito de mi amor.

SALOMÉ
Zambra (1938)
Letra: Salvador Valverde y Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Miguel de Molina
I
Por Juan Romero, rumí de Oriente,
bebe los vientos la Salomé,
gitana pura de sangre ardiente
que está loquita por su querer.
Su hermoso cuerpo, de bronce vivo,
quiere en sus danzas darle al rumí,
pero el Romero despreciativo,
cuando ella baila, se va de allí.
Y José, que la quiere,
al verla que está penando,
aunque de celos se muere,
así le dice cantando:
Estribillo:
Baila y ríe Salomé,
bajo la luz de la luna,
que ya que tuyo no fue,
no ha de ser para ninguna.
Con la sangre suya
teñiré mis manos,
para vengar con creces
mis celos gitanos.
Orvía mujé,
y alegra esa cara,
baila Salomé,
baila Salomé,
bajo el plenilunio
de la luna clara.
II
Luna de sangre que abrió en dos,
sobre la noche de los calés,
pagana fiesta que los gitanos,
al culto rinden de Salomé.
Y mientras ella baila sin velos,
Juan, el Romero, de allí se va,
José le sigue, lleno de celos,
y allá en sombra, brilla un puñal.
Salomé sigue bailando
con miedo y escalofríos
y José se va cantando
por la orillita del río:
Estribillo:
Baila y ríe Salomé,
bajo la luz de la luna,
que ya que tuyo no fue,
no será para ninguna.
Con la sangre suya
teñiré mis manos,
para vengar con creces
mis celos gitanos.
Orvía mujé,
y alegra esa cara,
baila Salomé,
baila Salomé,
bajo el plenilunio,
de la luna clara.

Versión grabada por:
Niña de la Puebla
I
Por Juan Bautista, rumí de Oriente,
bebe los vientos la Salomé,
gitana pura de sangre ardiente
que está loquita por su queré.
Su hermoso cuerpo, de bronce vivo,
quiere en la danza, darle al rumí,
pero el gitano despreciativo,
cuando ella baila se va de allí.
Y José, que bien la quiere,
al verla que está penando,
aunque de celos se muere,
así le dice cantando:
Estribillo:
Baila y ríe Salomé,
bajo la luz de la luna,
que ya que tuyo no é,
no será para ninguna.
Con la sangre suya
teñiré mis manos,
para vengar con creces
tus celos gitanos.
Orvía mujé,
y alegra esa cara,
baila Salomé,
baila Salomé,
bajo el plenilunio
de la luna clara.
II
Luna de sangre que abrió el verano,
sobre la noche de los calés,
pagana fiesta que los gitanos,
al culto rinden de Salomé.
Y mientras ella baila sin velos,
El Juan Bautista de allí se va,
José lo sigue, lleno de celos,
y allá en sombra, brilla un puñal.
Salomé sigue bailando
con miedo y escalofríos
y José vuerve cantando
su copla de desafío:
Estribillo:
Baila y ríe Salomé,
bajo la luz de la luna,
que ya que tuyo no fue,
no será para ninguna.
Con la sangre suya
yo he teñío mis manos,
y vengué con creces
tus celos gitanos.
Orvía mujé,
y alegra esa cara,
baila Salomé,
baila Salomé,
bajo el plenilunio,
de la luna clara.

SALVE A LA GIRALDA
Pasodoble (1957)
Letra: Antonio Quintero y Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Imperio de Triana
I
Yo le canto a la Giralda
le canto a su campanil;
me contestan por Triana
y el rio Guadalquivir.
¡Ay, ay, ay, mi alma llora!
eres poeta en la noche
que a todo el mundo enamora.
Bengala al amanecer,
mástil de un barco velero,
mástil de un barco velero
y un faro al anochecer.
Eres un rayo de luz
que alumbra de noche y día,
que alumbra de noche y día
al barrio de Santa Cruz.
Estribillo:
¡Ay, Giralda!
Los moritos no te hicieron;
te han hecho por arte y gracia
los angelitos del cielo.
¡Ay Sevilla!
Custodia de fina plata,
la que en la tierra más brilla,
es tu ángel de la guarda.
¡Ay, Giralda!
Orgullo de Andalucía,
eres la estampa que canta,
eres la estampa que canta
al mundo la España mía.
II
Cuando digo a la Giralda:
- ‘Sevilla vive por ti’
Me contestan sus campanas
y su torre de marfil.
¡Ay, ay, ay, Sevilla mía!
Jazmín que se abre de noche
por el que alma suspira.
Paloma al amanecer,
barquito de blanca vela,
barquito de blanca vela;
de oro al anochecer.
Una muralla de luz
que alumbra de noche y día,
que alumbra de noche y día
al Barrio de Santa Cruz.
Estribillo:
¡Ay, Giralda!
Los moritos no te hicieron;
te han hecho por arte y gracia
los angelitos del cielo.
¡Ay Sevilla!
Custodia de fina plata,
la que en la tierra más brilla,
es tu ángel de la guarda.
¡Ay, Giralda!
Orgullo de Andalucía,
eres la estampa que canta,
eres la estampa que canta
al mundo la España mía.

SANGRE DE MI VÍA
Tientos (1961)
Letra: Antonio Quintero y Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Luisa Ortega
I
Ya todo el barrio conoce el misterio
y las razones de la pena mía;
y entre las rejas de mi cautiverio
de amor me consumo de noche y de día.
Yo siempre visto de risa mi llanto
delante de ti …
Como si fueras el hombre más santo
que yo conocí.
Y aunque tengo derecho y razón,
hago un nudo con mi corazón.
Estribillo:
¡Sangre de mi vía!
Tú no has de sabé, tú no has de sabé
que yo vivo en constante agonía
desde que lo sé …
Rondé su calle desierta
y al dar las dos tus pasos sentí;
te vi llamar a su puerta,
después que abrió me quise morí.
Le pido a mi Dio me de voluntá
pa darme un punto en la boca,
aunque medio loca
voy a terminá …
Que para darme dos puntadas en la boca,
que me vuelvo loca
de tanto callá.
II
Cuando me dices: “Me voy al camino”,
en la solapa te pongo una rosa
y al despedirme me ven los vesino
besando tus labios contenta y mimosa.
Ellos no saben que tras de los muro
de mi corasón,
lloro de celos y juro y perjuro
vengá tu traisión.
Pero al alba te siento llegá
y mis celos se quedan en ná.
2º Estribillo:
¡Sangre de mi vía!
Tú no has de sabé, tú no has de sabé
que yo vivo en constante agonía
desde que lo sé …
Pensé marchá de tu vera
y así, y así poderte olvidá;
mas no lo intento siquiera,
pues sé, pues sé que vuelvo p’atrá
Le pido a mi Dio me de voluntá
pa darme un punto en la boca,
aunque medio loca
voy a terminá …
Que para darme dos puntadas en la boca,
que me vuelvo loca
de tanto callá.

SANGRE DE MIS VENAS
Zambra (1955)
Letra: Antonio Quintero y Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
La Paquera de Jerez
No me castigues mi niño celoso
con esas dudas que no he merecío;
que mi cariño es lo mismo que un pozo
en donde se ahogan mis cinco sentíos.
Si a ti te consta mi vía que te adoro
con negra pasión
porque maltratas con celos de moro
a mi corazón.
Y una fuente pa mí es tu querer,
pero tú no me dejas beber.
Sangre de mis venas
tengo que llorar,
porque en vez de quitarme la penas
tú a mí me las das.
Mi gloria se vuelve llanto
y no, y no me puedo valer
cariño de quebranto
por ti, por ti me muero de sed.
¡Clemencia por Dios
que no puedo más!
¡Ay, que cautiva de tus caenas
sangre de mis venas
tengo que llorar!
Final:
Mi gloria se vuelve llanto
y no, y no me puedo valer
cariño de quebranto
por ti, por ti me muero de sed.
¡Clemencia por Dios
que no puedo más!
¡Ay, que cautiva de tus caenas,
sangre de mis venas
tengo que llorar!
¡Ay!, que cautiva
de la cruz de tus caenas,
sangre de mis venas
tengo que llorar.

Versión grabada por:
Marifé de Triana
Vuelve a tu tallo jazmín oloroso,
y a tu orilla espuma del río;
nadie me quiere sacar de este pozo
en donde se ahogan mis cinco sentíos.
Yo que soñaba con el jardinero
del verde, verde limón,
al tronco vivo de aquel limonero
lo tengo en prisión.
Una fuente suspira a mis pies
y no pueo inclíname a beber.
Sangre de mis venas
tengo que llorar,
porque en vez de quitarte la penas
te las voy a dar.
Mi gloria se vuelve en llanto
y no, y no me pueo valer
aquél que yo quise tanto
me tie, me tiene que aborrecer.
¡Clemencia por Dios
que no pueo más!
¡Cautiva de esta caena,
sangre de mis venas
tengo que llorar!
Final:
¡Ay, que cautiva
de la cruz de esta caena,
sangre de mis venas
tengo que llorar!

SANTA LUCÍA
Bulerías (1942)
Letra: Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Estrellita Castro
Unos ojitos verdes
van por Triana.
Van por Triana
unos ojitos verdes.
Ven acá primo
y siéntate aquí.
Unos ojitos verdes
van por Triana.
Van por Triana
y a mí me tienen loca
Ven acá primo
y siéntate aquí.
y a mí me tienen loca
tarde y mañana.
Santa Lucía
te conserve los ojos.
Ven acá primo
y siéntate aquí.
Te conserve los ojos,
que son mi vía.

SE ACABÓ LO QUE SE DABA
Zambra (1957)
Letra: Antonio Quintero y Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Juanita Reina
Se acabó lo que se daba,
cada uno por su lao,
que no puede ser esclava,
que no puede ser esclava
quien pa reina se ha criao.
Tu eres pozo de amargura
y yo fuente de alegría;
y no quiero en tu negrura
enterrarme de por vía.
De aguantá ya me he cansao
esta cruz que me agobiaba.
Cada uno por su lao,
cada uno por su lao,
se acabó lo que se daba.
Y me fui de tu cariño
sin volver la vista atrá;
tú llorabas como un niño
pero a mí me daba iguá.
La lumbre de otros besos
de pasión me han encendío;
y mi amor lo tuve preso
como a mí me habían tenío.
Se acabó lo que se daba,
cada uno por su lao,
tu naciste para esclava,
tu naciste para esclava,
quien rey yo me he criao.
Esta cruz de mala suerte
me la tengo merecía.
Ayer di pena de muerte
y hoy me cuesta a mí la vía.
Del volcán que yo he sembrao
me alcanzó también la lava.
Cada uno por su lao,
cada uno por su lao,
se acabó lo que se daba.

SE CUMPLIÓ LA SUERTE
Zambra (1950)
Letra: Antonio Quintero y Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Manolo Caracol
Por estar siempre a tu lao
¡ay, clavel de carne morena!
yo no sé que hubiera dao
pues sin ti me muero de pena.
Que tu cariño
siendo mi gloria es mi tormento,
porque a otro hombre
le diste palabra de casamiento.
¡De casamiento!
Compañera de mi vía,
que penita y que doló,
yo no sé lo que daría
por pasarlo solo yo.
Adiós barquita velera,
adiós almendro florido,
adiós lunita lunera,
y adiós mis cinco sentíos.
Dejaré de verte,
se cumpla la suerte de esta maldición
no me llames, luz e mi alegría,
compañera mía de mi corazón.

SE DICE

Autores: Caro, Landeyra y Novacasa

Se dice si vas sola,
que desgraciada eres,
se dice que coqueta,
si con un hombre vas,
si ves a dos mujeres,
tambien se dice que
el mundo está al revés,
la cosa es murmurar.
Eres muy buena si
con arte, sabes fingir.
eres muy mala si
no sabes disimular,
y con la verdad, pretendes vivir.

Amar,
yo quiero amar con libertad,
porque nací mujer, para querer
y hacer mi santa voluntad.
Amar,
sin escuchar el que dirán,
pues todo es hablar,
hablar, por no callar.

Amar,
sin escuchar el que dirán,
pues todo es hablar,
hablar, por no callar.
Que digan lo que quieran,
a mi que más me da,
pues hace un rato largo
que yo me convencí,
que el mundo entero es,
un patio de vencindad,
y hay que tomarlo así,
da esa casualidad.

¡Hay que tomar el mundo a broma!
¡Viva el amor!
Por un capricho das la vida,
si es menester,
la vida es así,
que le vas a hacer.

Amar,
yo quiero amar con libertad,
porque nací mujer, para querer
y hacer mi santa voluntad.
Amar,
sin escuchar el que dirán,
pues todo es hablar,
hablar, por no callar.

Amar,
sin escuchar el que dirán,
pues todo es hablar,
hablar, por no callar.

Amar,
sin escuchar el que dirán,
pues todo es hablar,
hablar, por no callar.

SE FUE MI CORAZÓN
Canción (1967)
Letra: Rafael de León / Música: Augusto Algueró

Versión grabada por:
Raphael
I
Cuando me enteré,
lloré de amor por ti y te perdí;
lloré con rencor, lloré con dolor
tu falsedad, y también mi soledad,
y llorando, corazón,
te pregunté con ansiedad:
Estribillo:
¿Dime por qué
te fuiste lejos de mí?
Ningún motivo te di,
ni te falté.
Vuelve otra vez a mi rincón,
cuenta sin miedo con mi perdón.
¿por qué te has ido de mi lado corazón?
II
Nunca lograré
Poder, sin ti, soñar ni respirar;
morir es mejor
que andar sin tu amor,
y yo te pido, por piedad,
que de verdad me digas:
Estribillo:
¿Dime por qué
te fuiste lejos de mí?
Ningún motivo te di,
ni te falté.
Vuelve otra vez a mi rincón,
cuenta sin miedo con mi perdón.
¿por qué te has ido de mi lado corazón?
Final:
Dime por qué
te fuiste lejos de mí?
Ningún motivo te di,
ni te falté.
Vuelve otra vez a mi rincón,
cuenta sin miedo con mi perdón;
vuelve a mi lado te lo pido corazón.
Vuelve a mi lado te lo pido corazón.
Vuelve a mi lado te lo pido corazón.

SE ME MURIÓ TU AMOR
Canción (1970)
Letra: Rafael de León / Música: Juan Solano

Versión grabada por:
Rocío Jurado
Se me murió tu amor un mediodía,
en un patio de alegres macetones,
cuando el sol repartía sus doblones
a través de la verde celosía.
Se me murió tu amor sin agonía,
sin Requiest cat In Pace, sin crespones,
sin nadie que rezara en los rincones
tan siquiera, tan siquiera ni un leve avemaría.
Porque todo pasó frente a una boca
a la que yo besaba como loca
sin recordar la tuya en absoluto.
En absoluto.
¿Qué sucedió después? …
Pues que enterramos, enterramos
en mi frente tu nombre y mi pasado
y ni por ti, ni por tu amor me he puesto luto,
me he puesto luto, me he puesto luto.
Que ni por ti y por tu amor me he puesto luto.
Final:
En absoluto.
¿Qué sucedió después? …
Pues que enterramos, enterramos
en mi frente tu nombre y mi pasado
y ni por ti, ni por tu amor me he puesto luto,
me he puesto luto, me he puesto luto.
Que ni por ti y por tu amor me he puesto luto.
¡Luto!
¡ Me he puesto luto!

SE NOS ROMPIÓ EL AMOR

Autores: M. Alejandro, A. Magdalena

Se nos rompió el amor
de tanto usarlo.

De tanto loco abrazo
sin medida.

De darnos por completo a cada paso,
se nos quedó en las manos un buen día.

Se nos rompió el amor
de tan grandioso.

Jamás pudo existir
tanta belleza.

Las cosas tan hermosas duran poco
jamás duró una flor dos primaveras.

Me alimenté de tí
por mucho tiempo,
nos devoramos vivos
como fieras.

Jamás pensamos nunca
en el invierno,
pero el invierno llega,
aunque no quieras.

Y una mañana gris
al abrazarnos,
sentimos un crujido
frío y seco,
cerramos nuestros ojos
y pensamos:
Se nos rompió el amor
de tanto usarlo.

SENDAS DEL VIENTO

Autores: Gallardo y Sanchez Ortega


Callarse por un momento,
de la toná y seguiriya
que por las sendas del viento,
el aire va de rodillas
entre pintas y chumberas
el silencio es su crespón
que a la gente canastera,
le han partido el corazón.

Mi copla por los rosales,
dejarla que venga y vaya.
Que estoy llorando a canales
la pena de los Amaya.
La guitarra mora a puesto,
crespones en su compas
Y de luto para los restos
se vistió la soleá
Ya está la luna en la playa,
diciendo de madrugada
que pena, que pena
que pena Carmen Amaya.

Formando cruz lleva el agua,
dos ramas de hierbabuena
el yunque llora en la fragua
por una rosa morena,
los gitanos y las señoras,
el mocito y el marqués
toda España, reza y llora,
sin poder sin poderse comprender

Mi copla por los rosales,
dejarla que venga y vaya.
Que estoy llorando a canales
la pena de los Amaya.
La guitarra mora a puesto,
crespones en su compas
Y de luto para los restos
se vistió la soleá
Ya está la luna en la playa,
diciendo de madrugada que pena
que pena que pena
Dios mio, de mi alma, que pena
que pena Carmen Amaya.

RAFAEL FARINA
https://www.youtube.com/watch?v=85uvSlIc7ho

SEÑOR SARGENTO RAMÍREZ / VENGO A ENTREGARME
Zambra (1943)
Letra: Antonio Quintero y Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Esta copla es un romance del siglo XIX que con el título de “Vengo a entregarme” grabó Concha Piquer en agosto de 1943 para La Voz de su Amo. Unos años después, en 1947, Nati Mistral la interpretó en la película “Oro y marfil”, ya con el título de “Señor Sargento Ramírez”. Y más de un decenio después, Marifé de Triana la recuperó para interpretarla en su primera experiencia en el cine, “Canto para ti”, que se estrenó en 1959.

Versión grabada por:
Conchita Piquer
I
Póngame usté las esposas, señor sargento Ramírez,
póngame usté los grilletes que será mejor así;
que estoy pensando una muerte que no quiero cometerla,
que tengo un hijo y no quiero que se avergüence de mí.
Aunque no haya dao motivo diga usté que soy ladrona,
que ando por malos caminos, que ofendí su autoriá,
pero póngame usté presa, señor sargento Ramírez,
que mis manos no responden si sigo con libertá.
Carretera alante yo prefiero d’ir,
a seguirlo viendo con esa persona
que el agua y el aire me ha quitao a mí.
Estribillo:
Señor sargento Ramírez,
martirio me da un cristiano
y yo no quiero tomarme
la justicia por mi mano.
Yo te he sentenciao a muerte
pero me falta, serrano,
valor para aborrecerte.
II
Aquí tiene usté mis manos, señor sargento Ramírez,
póngame usté los grilletes, cumpla usted con su debé.
Si usté me hubiera escuchao cuando yo vine a entregarme,
no hubiera hecho la muerte que acabo de cometé.
Entre los juncos del río los dos se estaban besando
y una sombra blanquecina se apareció entre los dos;
con un cuchillo de luna corté la flor de un ‘te quiero’,
los corales de su sangre el agua se los llevó.

Sargento Ramírez, por amor de Dios,
que a mi criatura, por lo que más quiera,
no le diga nadie lo que hice yo.
Estribillo:
Señor sargento Ramírez,
martirio me dio un cristiano
y he tenío que tomarme
la justicia por mi mano.
Yo misma te he dao la muerte
pero me falta, serrano,
valor para aborrecerte.

Versión grabada por:
Marifé de Triana
I
Aquí tiene usté mis manos, señor sargento Ramírez,
póngame usté los grilletes, que será mejor así;
que estoy pensando una muerte que no quiero cometerla,
que tengo un hijo y no quiero que se avergüence de mí.
Aunque no haya dao motivo diga usté que soy ladrona,
que ando por malos caminos, que ofendí su autoriá,
pero póngame usté presa, señor sargento Ramírez,
que mis manos no responden si sigo con libertá.
Carretera alante yo prefiero d’ir,
a seguirlo viendo con esa persona
que el aire y el agua me ha quitao a mí.
Estribillo:
Señor sargento Ramírez,
martirio me da un cristiano
y yo no quiero tomarme
la justicia por mi mano.
Yo te he sentenciao a muerte
pero me falta, serrano,
valor para aborrecerte.
II
Aquí tiene usté mis manos, señor sargento Ramírez,
póngame usté los grilletes, cumpla usted con su debé.
Si usté me hubiera escuchao cuando yo vine a entregarme,
no hubiera hecho la muerte que acabo de cometé.
Entre los juncos del río los dos estaban hablando
y una sombra blanquecina se apareció entre los dos;
con un cuchillo de luna corté la flor de un ‘te quiero’,
los corales de su sangre el agua se los llevó.

Sargento Ramírez, por amor de Dios,
que a mi criatura, por lo que más quiera,
no le diga naide lo que hice yo.
Estribillo:
Señor sargento Ramírez,
martirio me dio un cristiano
y he tenío que tomarme
la justicia por mi mano.
Yo misma te he dao la muerte
pero me falta, serrano,
valor para aborrecerte.

Versión grabada por:
Nati Mistral
I
Aquí tiene usté mis manos, señor sargento Ramírez,
póngame usté los grilletes, que será mejor así;
que estoy pensando una muerte y no quiero cometerla,
que tengo un hijo y no quiero que se avergüence de mí.
Aunque no haya dao motivo diga usté que soy ladrona,
que ando por malos caminos, que ofendí su autoriá,
pero póngame usté presa, señor sargento Ramírez,
que mis manos no responden si sigo con libertá.
Carretera alante yo prefiero d’ir,
a seguirlo viendo con esa persona
que el aire y el agua me ha quitao a mí.
Estribillo:
Señor sargento Ramírez,
martirio me da un cristiano
y yo no quiero tomarme
la justicia por mi mano.
Yo misma te he dao la muerte
pero me faltó, serrano,
valor para aborrecerte.

SEÑORA REINA ISABEL
Canción (1946)
Letra: Antonio Quintero y Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Elenita Quesada
I
A la vera, vera,
vera de Moguer,
junto a la ribera,
llora una mujer;
se fue con la red de pescadores,
en un tres agosto, el galán,
cambiando un romance de amores
por otro de gloria y afán.
El agua salada
se lleva el lamento
que, la enamorada,
deshoja en el viento.
Estribillo:
Ay, señora, mi señora,
señora reina Isabel,
bendiga Dios, en buenhora,
los ojos de mi doncel.
Tres carabelas de plata
diviso en el alma mía;
los labios que a mí me matan,
van en la Santa María.
Tanto monta, monta tanto,
por Castilla y Aragón;
mientras que en un mar de llanto
navega mi corazón.
II
A la vera, vera,
verita del mar,
espera que espera,
se quedó Guiomar.
y vio regresar a una,
los hombres del bravo Colón,
mas no le preguntó a ninguno
la suerte de su corazón.
Amor y consuelo,
la reina le ha dado,
con él, su pañuelo,
su llanto a secado.
Estribillo:
Ay, señora, mi señora ,
señora reina Isabel ,
bendiga Dios en buenhora
tus manos de seda y miel.
Tres carabelas de plata
diviso en el alma mía;
los labios que a mí me matan,
van en la Santa María.
Tanto monta, monta tanto,
por Castilla y Aragón;
mientras que en un mar de llanto
navega mi corazón.

SEÑORA VECINA
Garrotín (1960)
Letra: Rafael de León y Andrés Molina Moles / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Marifé de Triana
I Vecina, señora vecina su niño de usté me mira al pasar. Vecina, señora vecina su niño de usté me empieza a gustá. Er pelo como la tinta, los ojos de cordobán, pero dicen que es un pinta que sabe más que Briján. Lo que le hace falta es una mujer que lave y que guise y sepa coser. Estribillo: ¿Por qué?, ¿por qué no le dice usté que me siga y me pretenda? Que su niño es una prenda si lo saben entender. Vecina, récele usté a San Antonio bendito a ver si hace un milagrito y se arranca de una vez. Encienda una vela que la pago yo, señora Manuela de mi corazón. II Vecina, señora vecina su niño de usté m’ha querío besá. Vecina, señora vecina en er corredor, ¡ojú!, con la oscuriá. Que niño más sinvergüenza, besarme a mí, ¡que valor!, a lo mejor usté piensa que más ganas tenía yo Esa cabesita la debe sentá que no vuelva a casa por la madrugá. Estribillo: Por qué?, ¿Ay, por qué no le dice usté que me siga y me pretenda? Que su niño es una prenda Si lo saben entender Vecina, récele usté a San Antonio bendito a ver si hace un milagrito y se arranca de una vez. Encienda una vela que la pago yo, señora Manuela de mi corazón. Final: Encienda una vela que la pago yo, señora Manuela de mi corazón. Por qué? Por qué?

SEÑORA

Autores: M. Alejandro y A. Magdalena
Patricia, concursante ejemplar de la semana, ha elegido para interpretar la canción “Señora”, una creación de Manuel Alejandro para Rocío Jurado, que ésta editó en 1980 en un l.p. que también llevaba el título genérico de “Señora”.

Rocio Jurado Señora letra

Cuando supe toda la verdad
señora,
ya era tarde para echar atrás
señora,
yo era parte de su vida
y él mi sombra.

Cuando supe que existía usted,
señora
ya mi mundo era sólo él,
señora,
ya llevaba dentro de mi ser
su aroma.

Él me dijo que era libre
como el mismo aire
que era libre
como las palomas
que era libre ...
y yo lo creí.

Ahora es tarde, señora
ahora es tarde, señora
ahora nadie puede apartarlo de mí

Él me dijo que era libre
como el vagabundo
que era libre
como la hoja seca
que era libre ...

Ahora es tarde, señora,
ahora es tarde, señora,
ahora nadie puede apartarlo de mí.

SEÑORÍO
Marcha (1963)
Letra: Antonio Quintero y Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Juanita Reina
I
Sevilla quita er sentío
por mu temprano que se levante
y gasta tal señorío
que su abolengo se ve al instante.
Y lo mismo en sus calles airosas
que en sus azoteas pintadas de cá,
que en las caras de sus Dolorosas
se nota la estirpe de sangre reá.
Estribillo:
¡Señorío!
tiene el chorro de la fuente
en el patio florecío.
¡Señorío!
más que nada tiene el puente
a caballo sobre el río.
El jazmín en la ventana
y el rosal en el balcón
y el clavel en la peana
de Jesús de la Pasión.
¡Ay, que mara, maravilla!,
los toreros de tronío
en la plaza de Sevilla
¡mire usté qué señorío!
II
Sevilla para el viajero
tiene el fresquito de sus saguanes,
sus rejas para el ‘te quiero’
y su museo de Surbaranes.
Y pa que voy a hablá de alegría,
en cuanto que llega la Feria de abrí
se les ve con la baba caía
diciendo: ‘Señores que gracia hay aquí’.
Estribillo:
¡Señorío!
el que tiene la peineta
sobre el pelo renegrío.
¡Señorío!
el que gastan las carretas
caminito del Rocío.
Er Cachorro de Triana
y ese manto señoril,
de color verde manzana,
de la virgen de San Gil.
Y la octava maravilla
por su gracia y colorío,
la Giralda de Sevilla
¡mire usté qué señorío!
Final:
Er Cachorro de Triana
y ese manto señoril,
de color verde manzana,
de la virgen de San Gil.
Y la octava maravilla
por su gracia y colorío,
la Giralda de Sevilla
¡mire usté qué señorío!

SEÑORITA
Canción (1974)
Letra: Rafael de León / Música: Juan Solano

Versión grabada por:
Enrique Montoya, Diego Benjumea, Manolo Escobar, María Jiménez
Lleva ya casi un siglo,
con un nombre en la boca
y jamás lo pronuncia
delante de la gente.
Es el nombre de un hombre
que bordó, como loca,
en sábanas de hilo
apasionadamente.
Cuando llega la noche
su pesar desemboca
en canción sin palabras,
amarilla y doliente.
Y en el mar del espejo
su sonrisa retoca,
por si acaso aquel hombre
volviera de repente.
Señorita,
la llaman el juez y el escribano,
que conocen sus años
y su pena infinita.
Señorita,
el muchacho, el niño y el anciano,
cuando vuelve del rezo
o sale de visita.
Y al mirar sin anillo
la nieve de su mano,
el pueblo soberano
la llama señorita,
señorita, señorita,
señorita, señorita.
Señorita,
le dice la gente maliciosa
al notar su pintura,
apagada y marchita.
Señorita,
el cartero, al verla ruborosa
preguntar por la carta
que tanto necesita.
Y ella sola, al mirarse
tan triste y ojerosa,
con rabia dolorosa,
se llama señorita,
señorita, señorita,
señorita, señorita.

SENTRAÑAS MÍAS
Marcha (1941)
Letra: Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Gracia de Triana
I Lo dejé que se acercara hasta mi reja,
una noche de claveles y de luna,
y que bajo, muy bajito, me dijera
lo que nunca, según él, dijo a ninguna.
Sus palabras,
repicaron en mi oído
lo mismito que un repique en las campanas.
Muchos sábados de gloria,
en las rosas de coral de mi ventana,
cuando le escuche esta copla
mientras iba clareando la mañana.
Estribillo
Ay, sentrañas de mi vía,
yo te quiero,
blanca como los azahares,
que da el limón limonero,
pá llevarte a los altares,
delante del mundo entero.
Te lo juro por mi mare
y no falto al juramento,
yo te querré mientras viva,
Dios me castigue si miento.
Yo te camelo de noche y día,
porque tú eres mi cielo.
Sentrañas mías.
Sentrañas mías.
II
Yo soñé con la mentira del cariño,
que tus labios muchas veces me juraron,
pero un día me trataron como a un niño
y el juguete de mis manos me quitaron.
En mi reja,
puse un llanto de crespones enlutados
y un dolor en mis campanas.
Muchos viernes de Dolores,
en las rosas de pasión de mi ventana,
cuando no escuche su copla
mientras iba clareando la mañana.
Estribillo
Ay, sentrañas de mi vía,
yo te quiero
Blanca como los azahares
que da el limón limonero
pá llevarte a los altares
Delante del mundo entero.
Te lo juro por mi madre
y no falto al juramento
yo te querré mientras viva ,
Dios me castigue si miento.
Yo te camelo de noche y día
Porque tú eres mi cielo.
Sentrañas mías.
Sentrañas mías.

SEPARAOS

Autores: I. Román y R. Jaén

“Separaos” es una copla por tientos de Ignacio Román y el maestro Rafael Jaén que Marifé de Triana grabó para la casa Columbia en 1967 y que se incluyó en un disco de cuatro canciones en el también se encontraba su versión del famoso “Tengo miedo”.

Ese que va por la calle
Que pasa y me mira como si tal cosa
Era mi vida y mi sangre
Mi norte y mi guía, mi pena y mi gloria

Le di la flor del cariño
El alma entera le di
Puede ser que al final del camino
Se acuerde de mí

Separaos, igual que dos enemigos
Separaos como la ortiga y el trigo
A vivir con aquel recuerdo
Los dos vamos condenaos
Y a pasar frente a frente sin vernos
Igual que dos ciegos
Separaos por tu delito y mi pena
Separaos con mi dolor por frontera
Se fue sin decirme hasta luego
Buscando los besos que nos tiene separaos

El corazón se le pare
Si pide clemencia para su persona
Antes me falte hasta el aire
Que verme a su vera en la misma gloria

Pedí perdón sin motivo
Después lloré y supliqué
Y su amor no merece un suspiro
Que yo bien lo sé

Separaos, y sé que sueña conmigo
Separaos como quien cumple un castigo
Me pidió perdón por aquello
Que casi estaba olvidao
Y mi amor que lloraba en silencio
Gritó con desprecio

Separaos, aunque te muera y me muera
Separaos aunque la sangre te duela
A pasar por la vida sin vernos
Ni vivos ni muertos,
Pa los restos separaos

SERÁ EL AMOR

(Guijarro-Algueró)

Tengo una alegría
Que cambió mi vida entera
Y no sé porque motivo
Ay, no sé por que razón
Será el amor, ay será será
Será el amor, ay será será
Será el amor, tu amor

No es mejor el día,
Ni cambió la primavera
Pero escucho melodías
Dentro de mi corazón
Será el amor, ay será será
Será el amor, ay será será
Será el amor, tu amor
Yo. quisiera saber

ESTRIBILLO :
Por que me sentí, tan loco mi corazón
Y por qué junto a ti, me siento feliz
Si nunca me dices que me quieres
Ni tampoco sé lo que prefieres
Pero, estoy contigo
Y me olvido de mis penas
Y no sé porque motivo
Ay, no sé por que razón
Será el amor, ay será será
Será el amor, ay será será
Será el amor, tu amor
Será el amor, ay será será
Será el amor, ay será será
Será el amor, tu amor

Yo. quisiera saber

(ESTRIBILLO)

Será, quizá, ay, será el amor.

SERÁ MI MÚSICA EL POEMA
Canción (1952)
Letra: Antonio Quintero y Rafael de León / Música: Manuel López-Quiroga

Versión grabada por:
Juanita Reina
I
Quiero perderme por Sevilla
igual que en una encrucijada,
para saber por qué se queja
la soleá de madrugada.
Quiero soñar en esos patios
hechos de luna y de marfil,
quiero clavarme las espinas
de sus rosales en abril.
Estribillo:
Y en una fuente macarena
de cristal,
beber el llanto de una pena
musical.
II
Será mi música el poema,
que está grabado en mis sentidos
ese suspiro que se quema
en vuestros labios encendidos.
Será el color de tu mejilla,
será una rosa hecha canción,
la melodía de Sevilla
que va a buscar mi corazón.
Estribillo:
Y en una fuente macarena
de cristal,
beber el llanto de una pena
musical.